martes, 20 de diciembre de 2011

'En busca del hogar' llega a Palencia


'En busca del hogar' ha llegado a Palencia gracias al esfuerzo del periodista local y amigo Álvaro Muñoz Caminero, que ha conseguido que la ciudad del Carrión haya sido el primer escenario no vallisoletano en acoger una presentación de la novela.

Las previsiones de público no eran muy buenas, dada la poca proyección del autor y su obra fuera de Valladolid, pero aquello era una buena oportunidad para celebrar un encuentro cercano e íntimo, una de esas situaciones en las que no hay agobios y todo adquiere un toque informal para convertirse en una charla entre amigos, donde no hay orador ni auditorio, y todo el mundo es a la vez emisor y receptor.

Como no podía ser de otra manera, el encuentro arrancó con Álvaro como maestro de ceremonias, mal rato le hice pasar por tener que hablar en público, pero se desenvolvió sin problemas ante sus paisanos y me allanó el terreno para que pudiera dar a concer esta novela de aventuras, barcos, piratas, reyes e inquisidores.

Caras conocidas entre el público, como Vera y Fernando, pero también alguna menos familiar, así como sorpresas. Fue el caso de Eva, compañera Erasmus a la que no veía desde nuestra común estancia en Turín y a la que la casualidad quiso traer de vacaciones a su ciudad desde la lejana Leeds (Reino Unido), en la que reside actualmente, una visita inesperada que, precisamente por ello, me generó una gran ilusión y agradecimiento.

A continuación llegó el turno de preguntas y el ambiente íntimo favoreció la participación de todos. Álvaro, fiel a sus raíces, quiso saber para cuándo una novela ambientada en Palencia, quién sabe. También hubo cuestiones referidas a mi consideración como escritor o periodista, o a si comparto similitudes con Marcial, el protagonista. Pero no toda la gloria fue para mí. La fantástica portada diseñada por Jehú Ramírez despertó la curiosidad del respetable. Lástima que en esta ocasión no estuviera Jehú por allí para recibir los elogios y sonrojarse.

Un encuentro diferente y agradable en la Biblioteca Pública, centro rebosante de sabiduría que nunca se visita demasiado. Un verdadero placer el haber compartido esa fría tarde de diciembre con el público palentino.

¡Gracias Palencia!

martes, 13 de diciembre de 2011

Lunes 19 en Palencia

Este lunes, 19 de diciembre, será el turno de presentar 'En busca del hogar' en la capital palentina. El lugar elegido es la sala de audiciones de la Biblioteca Pública de Palencia, donde estaré acompañado de mi gran amigo Álvaro Muñoz Caminero, periodista local, a quien corresponderá la tarea de maestro de ceremonias. Todo ello a partir de las 19.30 horas, que gran manera de celebrar el cumpleaños de mi santa madre. ¡Allí os esperamos!

domingo, 11 de diciembre de 2011

¡Gracias Pedrajas!

Siempre resulta emocionante presentar esa primera novela ante un público nuevo, pero si ese público se compone de familiares, amigos y paisanos, todo adquiere un aroma hogareño que te alegra el corazón. Así se puede resumir lo que ha sido la presentación de este domingo en mi pueblo, en Pedrajas de San Esteban.

Al igual que en la presentación oficial en Valladolid, he tenido el privilegio de contar como padrino de excepción con el subdelegado de Gobierno en la provincia, Cecilio Vadillo, acompañado, en esta ocasión, por el alcalde de la villa, Sergio Ledo.

Ambos me han abrumado con sus elogios, del todo inmerecidos, tras lo que me ha llegado el turno de tomar la palabra. A diferencia de mi primera presentación, el lugar elegido, la Sala Cultural y de Exposiciones municipal, aportaba un toque de cercanía en el que la gente me rodeaba y, lo más importante, me acompañaba.

La estancia tenía las sillas de manera que formaba un hemiciclo que envolvía la mesa, la cual estaba al mismo nivel que los asistentes. Ventaja de cercanía, inconveniente de la visibilidad. A pesar de todo, el acto se ha desarrollado entre el calor de la gente que compensaba la frialdad de la mañana pedrajera.

Quizá lo más bonito, después de que haya soltado mi tradicional perorata, es recibir las preguntas de tu gente, conocer sus opiniones y debatir acerca, no sólo de la novela, sino de la magia que rodea al oficio de escribir. Una deliciosa tertulia literaria, en resumen. También ha habido tiempo de reivindicar el tan denostado 'botellón' como algo cultural que enriquece a la juventud, a pesar de lo cual no está de más reclamar siempre civismo y evitar los excesos.

A continuación, turno de firmar ejemplares, con la circunstancia de que es la gente que conoces la que se acerca en busca de tu rúbrica, te felicita y te hace enrojecer; pero para eso, nadie como Jehú Ramírez, amigo y autor de la soberbia portada de 'En busca del hogar', quien ha tenido que tragarse su vergüenza y ponerse en pie para recibir el merecido aplauso del auditorio. Gracias una vez más, Jehú.

Un rato agradable en Pedrajas rematado con unas cervezas en ca Conrado, sempiterno bar de la localidad en el que celebrar, no la publicación de un libro, sino el cariño de un pueblo.

¡Gracias Pedrajas!

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Una tarde de café

En ese afán incontrolable por mamar de los maestros y poder decir, sin sentirme un impostor, que soy escritor, he quedado a tomar un café con Gustavo Martín Garzo, Premio Nacional de Narrativa 1994, Premio Miguel Delibes 1995 y Premio Nadal 1999.

Hemos quedado, por decisión suya, en el café del Teatro Zorrilla. Por lo que cuentan, no es raro verlo por allí. Yo llego un poco antes, pero apenas he echado mano al móvil para bucear en Internet y matar el tiempo cuando aparece con un abrigo largo que no se quitará en todo el rato que estemos juntos. Anda algo resfriado, ésa es la razón, la misma por la que ha estado a punto de cancelar la cita, pero al final ha venido.

Hemos quedado, me permito reiterar esta expresión, para tomar un café, pero ninguno de los dos toma café. Al igual que yo, él también es un gran amante del té, aunque esta vez yo me decanto por una Coca-Cola. Hubiera sido muy bohemio añadirle un chorrito de ron, pero no me parecía apropiado, ya me emborracharé este sábado.

Comienzo con una confesión, un amigo ha descubierto hoy mismo una falta de ortografía en mi novela que me abochorna. “Ya puedes ir haciéndote a la idea de que eso es inevitable en cualquier libro, por mucho que lo revises”. La verdad es que me tranquiliza, buen comienzo.

Charlamos mucho y de muchas cosas, de mi novela, de la ansiedad al escribirla, del rumbo que toma una obra sin que llegues a controlarla, de lo que escribes y, lo que para él es más importante, de lo que no escribes, de lo necesario que es dejar cosas sin contar. Tomo nota de todo ello en mi cabeza, hay mucho que mejorar para la próxima, aunque Martín Garzo me asegura que esa percepción es algo “muy común” en todos los escritores, al menos en su caso.

Gustavo resulta encantador en el trato, parece algo tímido, quizá algo inquieto, pero sobre todo transmite bondad, e ilusión, la ilusión de un escritor novel, a pesar de su dilatada carrera literaria. No puedo por menos que compartir prácticamente todas sus reflexiones; algunas ya estaban en mi mente, a otras me suscribo al descubrirlas.

Le pido que me firme algunas novelas suyas que tengo en casa. Una en especial: ‘Las historias de Marta y Fernando’. Le pregunto por el nombre de la protagonista, “simple casualidad”, me dice.

-¿Por qué lo preguntas?

-Nada, su nombre y su descripción me traen recuerdos.

La conversación es amena y la hora se pasa casi volando, caminamos hasta El Corte Inglés. A mí me pilla de camino a casa y él quiere mirar unos DVD. Es un gran cinéfilo, según me confiesa. Ha sido un rato agradable. Casi se me olvida, justo antes de que se vaya le pido que se haga una foto conmigo, es preciso inmortalizar ese momento.



Domingo en Pedrajas

Este domingo, 11 de diciembre, llega el turno de presentar 'En busca del hogar' en Pedrajas de San Esteban (Valladolid). Será a partir de las 12.30 horas en la Sala Municipal de Exposiciones, antiguo edificio de las Piscinas. Allí podréis conocer más sobre la novela, preguntar alguna duda y, por supuesto, realizar cualquier crítica.
¡Nos vemos en Pedrajas!

martes, 6 de diciembre de 2011

Miércoles en la SER

Este miércoles, 7 de diciembre, estaré en el programa 'Hoy por Hoy Valladolid', de la cadena SER, a partir de las 13.15 horas, en donde daré a conocer a todos los oyentes 'En busca del hogar'. En el 1044 onda media y 106.7 FM

domingo, 4 de diciembre de 2011

Reflexiones con un Premio Cervantes


Gran verdad es esa de que nunca se deja de aprender, pero cuando se dan los primeros pasos, la lección de un maestro resulta fundamental. Si, como ha sido mi caso, tienes la suerte de que dicho maestro sea nada más y nada menos que un Premio Cervantes, la lección magistral se convierte en todo un privilegio y un placer inenarrable. Pero, a pesar de ello, osaré intentarlo y trasladar al lector una vaga idea de mi encuentro con José Jiménez Lozano.

A sus 81 años, don José se presenta como un hombre cercano, de palabra fácil, a veces atropellada. Sus penetrantes ojos, que en ocasiones parecen querer salirse de esa cara marcada por el tiempo, observan todo cuanto acontece alrededor, como si quisiera absorber en un instante el conocimiento que flota en el ambiente. Sólo con esa actitud se entiende una carrera literaria tan brillante.

Nacido en Langa (Ávila), Jiménez Lozano reside desde hace décadas en el vallisoletano municipio de Alcazarén, en una casa de sabor rústico con amplios jardines que se intuyen apetecibles para pasar largas tardes estivales. En este caso, los rigores del clima castellano desaconsejan tal extremo y el insigne escritor me recibe en su despacho, donde un flexo ilumina su gran mesa de madera mientras la penumbra inunda el resto de la estancia, repleta de libros que ya ni caben en los estantes, y entre ellos, el mío.

Don José aún no lo ha leído, no hace mucho que lo tiene y apenas lo ha ojeado. Su tranquila vida en Alcazarén se ve a menudo interrumpida por compromisos en Valladolid o Madrid, o en cualquier otro sitio donde una reunión de escritores o una mera conferencia a jóvenes estudiantes requiera de su presencia y sabiduría. Sin embargo, ya me ha convocado para recibir halago o reprimenda cuando haya realizado una lectura más profunda.

No hablamos de mi libro, pues, pero hablamos de literatura, de lo que es ser escritor, de lo que fue ser escritor y de lo que será ser escritor; de la tiranía del mundo editorial y las bondades de sus campañas promocionales que quitan al lector la prerrogativa de dictar qué obra se convertirá en 'Best-Seller', pero también del enfangado terreno de lo políticamente correcto.

POLÍTICAMENTE CORRECTO

Mención aparte requiere este capítulo. En el escritor abulense que en 2002 logró el Cervantes, el mayor reconocimiento para un autor de habla hispana, florecen la rabia y la tristeza. Frente a la desaparecida censura, donde se fijaba una serie de puntos que "no se podían tocar", Jiménez Lozano lamenta que ahora lo políticamente correcto "eche a los escritores" que no se someten "a ese pensamiento único, de una forma sutil, bajo una aparente libertad".

Por suerte no he conocido la censura y no llego a estar del todo de acuerdo, pero reconozco lo peligroso de ese dogma de fe que supone lo políticamente correcto, algo que, como su propio término indica, debería atañer exclusivamente a los políticos.

Debate, algún acuerdo, algún desacuerdo y muchas anécdotas, y es eso lo más delicioso, conocer a través de sus protagonistas las vivencias de un escritor a lo largo del siglo XX, como sus tertulias literarias en su época de estudiante en Madrid, en las que, al igual que yo hoy, visitaba en los cafés más destacados de la capital a ilustres plumas como Pío Baroja.

Diferentes anécdotas en algo más de una hora de encuentro que quedan en mi memoria como uno de los momentos más útiles para seguir adelante con esto de la literatura y seguir avanzando, mejorando a través del ejemplo de los mejores. Un encuentro cálido en una fría tarde de domingo.